El morrillo es un corte de carne excelente para largas cocciones, por cierto, es la forma ideal de prepararlo para que quede bien blando y sabroso.
Para esta receta que sirve cerca de 8 porciones bien generosas, precisará los siguientes
ingredientes:
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1 pieza de morrillo de cerca de 2 kg
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1 cucharada de sopa de aceite
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3 cucharadas de sopa de verdurita picada
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2 cucharadas de sopa de ajo picado
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1 litro de caldo de carne (o 3 cubitos de caldo de carne)
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3 cucharadas de sopa de salsa inglesa
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Sal al gusto
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Pimienta negra molida al gusto
Con un cuchillo fino y bien afilado, agujeree superficialmente el morrillo. Esto ayudará a la carne a absorber mejor los sabores de los condimentos.
Caliente el aceite en la olla de presión y rehogue la cebolla y el ajo. Tenga cuidado para no
quemarlos, ya que queremos dejarlos levemente fritos.
Si usa caldo de carne, ahora ponga 2 vasos en la olla. Si va a usar cubitos de caldo de carne, ponga dos vasos de agua en la olla de presión para disolverlos ahora.
A continuación, posicione la pieza de morrillo condimentada con sal y pimienta negra en la olla de presión. Cubra con el resto de caldo de carne o agua hasta tener unos 4 dedos de líquido sobre la carne. Tape la olla de presión y deje cocinar alrededor de dos horas. Un consejo: después de que tome presión, deje la llama a fuego bajo porque la olla seguirá con la misma temperatura que estaba con el fuego alto.
Pasado este tiempo de cocimiento en la olla de presión, vamos a finalizar el morrillo en el horno. Si desea guarniciones, recomendamos llevarlo al horno con papas.
Ponga el morrillo en una asadera antiadherente o untada con aceite. Condimente nuevamente con sal y pimienta y frote la salsa inglesa por toda la carne. Lleve al horno precalentado a 200ºC por otros 30 minutos.
Ahí basta cortar en fetas y servir. Papas asadas, arroz blanco y una ensalada verde simple son guarniciones perfectas para este morrillo.