Por su ternura y jugosidad, el solomillo es el corte perfecto para hacer recetas con las más distintas salsas. ¡No es por acaso que el strogonoff de solomillo le encanta a todos!
Nuestra receta de hoy es una variación que tiene como guarnición chips de mandioquiña (zanahoria blanca, apio criollo, racacha, virraca). Si usted desea, puede cambiar la mandioquiña por cualquier otro vegetal de su preferencia, como papas, remolachas o, incluso, bananas.
Para iniciar, vamos a hacer los chips de mandioquiña. Usted necesitará la mandioquiña, un molde para levar al horno, aceite de oliva extra virgen, sal y hierbas aromáticas de su preferencia.
Un detalle interesante es que si usted la lava bien a la mandioquiña, no es necesario sacarle la cáscara.
Para comenzar, precaliente el horno en fuego medio mientras corta la mandioquiña lo más fino posible. Inclusive, si tiene un cortador de vegetales, recomendamos que lo use.
En un bol, coloque las rodajas de mandioquiña y condiméntelas con el aceite de oliva extra virgen, la sal y sus hierbas aromáticas preferidas. La cantidad de aceite de oliva dependerá de cuantas rodajas de mandioquiña tiene usted, pero basta usar lo suficiente para dejar todas bien untadas – de esta forma, no es necesario que se eche más aceite en el horno.
Distribuya los chips de mandioquiña en la fuente dejando un espacio entre las rodajas y lleve al horno por 10 a 20 minutos aun en fuego medio, dependiendo de la potencia de su cocina. Pasados 10 minutos, lo ideal es conferir si los chips ya están dorados.
Al ver que uno de los lados del chips de mandioquiña está dorado, retire del horno y dele vuelta, lleve al fuego una vez más por el mismo tiempo. Después basta sacarlas del horno y servir.
Mientras espera que los chips de mandioquiña estén prontos, podemos pasar a la preparación del solomillo con la salsa de mostaza.
Para dos personas, necesitamos los ingredientes que siguen:
- 250 gramos de solomillo
- 1 cebolla
- 3 cucharadas de coñac
- 1 cucharada de salsa inglesa
- 1 cucharada de mostaza
- 200 gramos de champiñón
- 1 pizca de páprika dulce
- Pimienta negra a gusto
- Sal a gusto
- 200 gramos de crema de leche fresca
Pique la cebolla en cubos bien pequeños, los champiñones en pedazos y manténgalos aparte. Para el solomillo, haga tiras en el caso de que usted haya comprado un pedazo entero y condiméntelas con sal.
Lleve la carne y la cebolla a una sartén bien caliente con aceite hasta que el solomillo esté dorado y la cebolla translúcida. Entonces agregue el coñac y flambéelos: el coñac prenderá fuego en la olla y evaporará todo el alcohol y dejará solo su sabor.
No se preocupe con la llama al flambear, pues rápidamente se extingue. En el caso de que demore para que el coñac prenda fuego, incline levemente la sartén hacia el fuego para que todo el coñac se acumule en un borde cerca a la hornalla de la cocina, eso acelerará el proceso de flambeo.
Tras flambear, agregue la crema de leche fresca, el champiñón, la mostaza, la salsa inglesa, una pizca de páprika dulce y pimienta negra a gusto. Mezcle bien y deje que hierva.
Ahora con el solomillo con mostaza listo, basta servir con los chips de mandioquiña y arroz blanco. ¡Buen provecho!